miércoles, 31 de diciembre de 2014

Para mi musa III

Alicia en el país de las maravillas era nuestra película. Cada noche de sábado, frente a la la luz tenue del televisor, se nos planteaba la duda de tomar un sorbo de ese elixir que rezaba "Bébeme" y que te haría muy pequeño, o de ese otro que te haría tremendamente grande.
Me abrazabas al tiempo que susurrabas "Sea cual sea nuestra decisión, será juntos". 
Luego, al amanecer, recitabas fragmentos de la película en mi oído, hasta sacarme una sonrisa.

                          "No estoy loco, mi realidad es diferente a la tuya"   




Hoy es sábado, la luna saluda desde su lugar en lo alto del cielo. Y, tengo miedo. El manto de la noche cae sobre mis hombros como un peso muerto. Y me acecha el terrible temor de no oír tus susurros, aunque sea en sueños. Porque, sin tu voz dulce y acaramela, suave como terciopelo, acariciando mis oídos, el sentido pierdo. 

Y ahora, en esta medianoche oscura, despierta me hallo, el cuaderno abierto en mi regazo, garabateando en sus hojas nuestros recuerdos. Como un Picasso, sin ton ni son, como abstracto. 
Miro al cielo, y casi confundo las estrellas con tus ojos. Pero, la media luna, me recuerda que ahí estás tú, descansando en su perfil, acurrucado en su luz. Curioso que desde que te has ido todas las lunas son así, como si estuviera de luto, y una parte de ella se hubiera ido también. 

Parece mentira, que pese a este tremendo dolor presionando en mi pecho el mundo sigue girando, como una bailarina. 

Y yo, como una bailarina mareada de tanta pirueta, descansaré en el pozo de lágrimas, esperando que del agua salada que riega brote tu alma y abrace la mía.  


lunes, 29 de diciembre de 2014

Sinsentido infantil

Miré con recelo los juguetes en mi estantería. El sol entraba por la ventana, el frío aire del invierno penetraba súbitamente en la estancia.
Una brisa gélida recorrió mi cuerpo.
Supe que no era el viento mas, algo en mí, no me permitió reconocerlo.
La melodía de la radio encendida aletargaba mis párpados, al son del arrullar del río, del chisporroteo de la chimenea.
Me eché sobre la cama, mirando al techo.
Recordaba aquel lugar. Siempre que tenía dudas acudía allí, la pintura blanca de aquella habitación siempre me ayudaba a encontrar mi paz.

Me quedé dormida y tuve un sueño. Soñaba que estaba soñando que vivía en un sueño. Y ahí estaba mi infancia guardada en secreto. Y allí guardaba la llave para abrir mi deseo.

Desperté confundida, con miles de ojos a mi alrededor. Eché una ojeada a la habitación. Recuerdos y más recuerdos, del amor y el desamor. Una vida vivida en alegría, desánimo y pavor. Una felicidad que un día, sin previo aviso, sus puertas cerró.
Una lágrima despistada asomó a ver si podía salir al exterior.
Eché mis manos al rostro para alcanzar mi entendimiento.
Sabía que estaba llorando pero no sabía la razón, lloraba sin consentimiento.

Me acerqué a la estantería y alargué la mano. Al rozar aquellas fotografías enmarcadas en mi memoria, aquellos muñecos, juguetes, peluches; trozos de tela, plástico y madera para muchos, pude sentir un revoloteo de sensaciones en mi interior. Una jaula que se abría para dar paso a una sensación de fulgor.
Las lágrimas no cesaban pero, esta vez, no eran sino lágrimas de alegría.

Sí. Abandonaba a mi infancia a pasos agigantados. Pero mi pequeño corazón, por muy crueles decisiones que los dedos miserables que dan cuerda al reloj cometan, siempre tendrá ese destello de locura infantil, de desvergonzada alma, de llanto fácil, de fuerza sobrehumana, de superheroína y villana, de noches de abrazos y noches de estrellas. Ese brillo en la mirada al ver el sol, al ver una sonrisa.
Podré crecer pero siempre seré una niña.


domingo, 28 de diciembre de 2014

Fin de año

Cuenta atrás...

Solo quedan cuatro (?) días para que termine el año. El 2014 ha sido un año lleno de ilusiones, hazañas y lecturas trepidantes.
Pero se acaba, sí, parece demasiado corto porque no nos ha dado tiempo ha cumplir todos esos objetivos. Pero tranquilos, aún queda el 2015, para retomar esos proyectos viejos y esas ideas desechadas. Para leer y escribir lo que quisimos en el 2014.
Bueno, no me alargo más. En estos cuatro días de cuenta atrás subiré una entrada especial relacionada con el cambio de año, y, obviamente con la temática de este blog; la literatura.


           Libros del 2014 ;                                                                                  




  • El increíble viaje del faquir que se quedó                          
  • atrapado en un armario de Ikea.                              
  • Diez
  • La estrella de plata                                                          
  • Fangirl
  • El caso galenus                                                          
  • Sangre en la piscina
  • Esta noche dime que me quieres
  • Si me dices ven lo dejo todo
  • El juego de Ripper
  • Veronika decide morir
  • El Alquimista
  • Muchísimos más que no recuerdo...







Estoy obsesionada con un libro. Insanamente obsesionada. Hacía meses que llevaba deseando un clásico de Agatha Christie. Diez negritos. Lo pintan como una maravilla.
Pero, al abrir el paquete me encontré con una portada oscura y letras rosas que rezaban "Diez" busqué "negritos" pero ni rastro.
Le di la vuelta, leí la sipnosis, y sencillamente me quedé prendada de el. Es un "remake" de Diez negritos, y por lo que llevo leído me está encantando.








El 2014 no ha sido suficiente, no me han llegado 365 días para cumplir mis propósitos.
Solo dos de ellos.
Dos.
Deprimente.


Propósitos literarios del 2014                                                                 Propósitos literarios del 2015


Escribir una novela                                                                        Escribir una novela
Continuar y mejorar el blog                                                           Publicar una novela
Escribir más acerca de mis sentimientos                                       Ir a curso de escritura
Terminar el libro que tenía empezado                                           Publicar la primera novela "La luz
Publicar una novela                                                                       de una sonrisa"
Publicar una recopilación de relatos                                              200 seguidores
Escribir más poesía                                                                        Ganar concursos de relatos
                                                                                                        Presentarme al concurso de Jordi
                                                                                                        Sierra i Fabra y a la NanoWrimo



Mejores libros del 2014          

En este año he leído un montón de libros geniales, pero algunos tengo que destacarlos si o sí porque han sido aún mejores que geniales, y debéis leerlos porque son súper increíbles.

Este libro es perfecto. Te mantiene alerta e intrigada. Y es que no podría ser mejor, y no tengo ni una sola queja. Es increíble.


Me ha sorprendido. Y a pesar de ser un montón de páginas se lee rápido e incluso resulta ligero.











Tenéis que adorarlo. Lo tengo en un pedestal.
Es esperanzador, optimista y precioso.
Tiene miles de frases sentimentales.
Es lo más especial que he leído.







Y esto es todo por la entrada de hoy.
Mañana os espera algo mejor.






Quiero saber....contadme ¿qué libros habéis leído este año? ¿cuales de ellos cabe destacar? ¿habéis cumplido vuestros propósitos personales, o aún están sin tachar? ¿que esperáis del 2015?











viernes, 26 de diciembre de 2014

Nuestro olvido

Puedo escribir mil versos sobre la luna gris,
me quedo mirando a su hermosa figura,
colgante de la nada,
con un sedal de plata invisible.
Podría hacer rimar palabras para hacerte saber,
que eres la luna que calma mis noches,
que despeja la niebla,

miércoles, 24 de diciembre de 2014

II Para mi musa

"Segunda página. No me culpes por revivir viejas historias, por remover tus cenizas. Soy una egoísta, siempre lo he sido.
Los árboles están en flor, los cerezos dibujan rosados algodones en sus copas. Pero en el cielo, prendida, cabalgando sobre la punta de las montañas una ligera niebla.
Mi corazón está a su vez nublado, el aroma de las flores nacientes consigue hacer que casi pueda tocar aquellos antiguas tardes en tu regazo. Casi siento el aroma dulce de tu pelo, el tacto áspero de tus manos.
Las que se deslizaban por mi piel como si fuera un piano, creando melodías jamás escuchadas, de suspiros y "te quieros".
Y cuando hacía viento, me agarrabas de la cintura mientras una lluvia de pétalos arrancados caía sobre nosotros. Éramos los capitanes de nuestro propio Titanic, pero sin el estúpido Iceberg de por medio. Éramos dos fusionados en uno solo.
Éramos cuerdas de un violín dispuestas a expresar juntos lo más bello.
¿Y ahora? Nunca me enseñaste a sobrevivir sin tu abrazo, no puedo volar con una sola ala, a respirar con un solo pulmón, a vivir solo con la mitad de mi corazón.

Comparto mis ideas con el viento, cuento mis sentimientos a los pájaros. Y a este cuaderno, que no creo que merezca conocer nuestra historia.

Contigo aprendí a soñar con los ojos abiertos. Porque...Realidad. ¿Que la diferencia de los sueños? La realidad ocurre, los sueños también, tal vez en mundos diferentes, pero mundos al fin y al cabo.
Abro los ojos y no veo más que mentiras, realidades maquilladas, lienzos sobrepintados.
Pero me da igual. Sinceramente no me importa en absoluto lo decorada que pueda estar la verdad, voy a creer en ella, si, voy a vivir de fantasías. Porque las mentiras son, después de ti, lo más bonito que me han dicho en la vida.

Voy a dedicar mis días a soñarte, a escribirte, a extrañarte.

Siempre tuya, "
                     


lunes, 22 de diciembre de 2014

Gotas de carmín en mi memoria.

"En mis más temblorosas noches, en las que las trémulas gotas caen sin piedad, golpeando con fuerza los cristales. Esas gotas que me desvelan, que me impiden conciliar el sueño.
Comienzo a pensar en ti.
El sonido del reloj continua su camino.
Me pregunto, amor, cómo serán tus ojos iluminados por una vela. Cómo serán tus besos en un momento de soledad. Si serás o no un espejismo, fruto de los perros que remuerden las entrañas de mi conciencia.
Daba vueltas en la cama, buscando consuelo. Estiraba la mano procurando tu pelo. Encontré vacío, un suave susurro de deseo y un ligero olor que habías dejado con la madrugada.
Al alba te escribo, como si una nota para marcharme te dejara.
Te escribo solo para no derramar más lágrimas sobre la almohada, para decirte que tu ausencia es el peor castigo para el alma. Para recordar que el amor no es más que una pequeña pieza que provoca que mi corazón lata. Que te quiero tanto como veces un segundo pasa, que me contengo para no morirme cuando sonríes, para evitar soltarte.
He librado mil batallas para dejar de escuchar tu música. Esa de cuando me hablar. Pero un intenso y cálido fulgor en mis mejillas sonrosadas me delatan.
Si pudiera decirte una vez más que te amo, que te quiero, que por ti lo daría todo, dormiría en tu puerta esperando una respuesta.
Esperaría a que los atardeceres dejaran de tener ese aire encendido, o que dejaran de teñir los cielos para recordarte que me apago.
Sí, mi amor es como un día.
Que comienza iluminando tus pestañas, colándose entre tus párpados, sumiéndote en calor.
Atardece suavemente, dejándote respirar un tierno rato el olor del sol.
Mi noche te ilumina, te guiará con dolor por no poder verte.
Yo brillaré en tus ojos, seré tu luna y tus estrellas. Solamente si me dejas, iluminaré tus lágrimas. Daré belleza a tu tristeza, y acariciaré tu llanto.
Y cuando menos te lo esperes, susurraré en tu aliento que te amo.
Estaré en el viento, en las piedras con las que, en tu camino, tropiezas, en las estrellas y en la arena que, con sutileza, tocas.
En el mar infinito, en los océanos, mares y ríos. En la hierba que pisas y en el cielo que visitas.
Yo seré tu sonrisa más tierna, la sarcástica y tu risa. Seré el gesto de tus manos, seré la lluvia más fina.
Yo seré la vida que te pese y que, al mismo tiempo, te acaricia.
Tú solamente quiéreme."


I Para mi musa

"Esta historia comienza en el interior de un cuaderno de tapas de cuero. Marrones, con la simpleza de lo más bello jamás imaginado.  
En septiembre, con una ligera brisa corriendo entre los pliegues de mi falda. Y con tu dulce mirada que todo lo derrite.  
Soy la protagonista más idiota para una historia así, pero algo que nace en mi interior me obliga a abrir ese cuaderno por la mitad, poner una música alegre de un CD que tu me regalaste, cuya portada reza "Para mi musa".  
Las notas de tu piano se cuelan en mi mente, hacen resucitar viejos recuerdos en los que tu agarrabas mi cintura y acariciabas con la suavidad de la brisa primaveral mis labios con los tuyos.  
No quiero llorar. No puedo. Los muertos no lloran, no sienten ni padecen. Mi mente ha muerto contigo, pero mi cuerpo sigue paseándose. Intentando comprender por qué, por qué te ha tenido que pasar a ti y no a cualquier otro.  
Pero aún soy joven. Encontraré a alguien, eso dicen. Aunque las hojas de este cuaderno parecen estar apunto de acabarse.  
La soledad huele a flores secas.  
La soledad me obliga a escribir esto para rescatar el sentimiento de que merece la pena seguir viva.  
Si los suspiros hablaran, el mundo sería un torbellino de recuerdos por mí susurrados. Porque de mi aliento escapa el sabor de tus ojos acaramelados de los que ya no queda ni el brillo.  
Y si el destino se empeña en hacerme llegar las palabras que tus suspiros esconden, tal vez podría recuperar la sonrisa desvanecida de mi rostro fantasmagórico. Traslúcido como nubes de porcelana pendiendo de un cielo tan falso como las palabras "Estoy bien".  
Y a veces no sé ni lo que digo. Me escapo poco a poco del mensaje que de verdad quiero expresar. Bueno, creo que no tengo que decir explícitamente que te quiero. Creo que enlazar las palabras como lo he hecho, buscándolas con cuidado entre las caricias tuyas que se agolpan en mis recuerdos, podré hacerte saber que eres lo único por lo que daría la vida, y el hecho de que no estés no hace más que aumentar mis ganas de buscarte en el mundo de los muertos, si es que existe tal.  
Se me agotan las letras, estoy llegando al final. Al final del principio de este cuaderno de cuero que conseguiré hacerte llegar si es que los muertos saben leer.  
Siempre tuya, " 

                                       



jueves, 18 de diciembre de 2014

Rimas indecisas

Indecisas. Perdidas y apresuradas. Inspiradas por una canción de fondo bastante pasada de moda. Algunas sin sentido. Otras apasionadas. Simplemente palabras que intentan enlazarse con la anterior, sin conseguirlo.
Sueñan con aspirar a algo más que palabras, con cobrar vidas, con ser inventadas. No soy más que pintora de palabras en blanco y negro.
Soy música de letras, compás a compás, punto tras punto, coma por coma. Escribiendo la canción de la vida, la de las rimas indecisas y los suspiros.
Escribiendo todo aquello que pretendo vivir. O siendo el fuego que quema aquello preparado para arder. Llamas y cenizas. Que vuelan libres, sin necesidad de alas.
Y aquí estamos nosotros, atados por la gravedad, pesos plumas de millones de toneladas, que creen ser libres, pobres ignorantes.
Envejecemos como rimas, seguimos indecisas, perdidas y apresuradas.
Sin reparar en el paso del tiempo a la velocidad de la luz. Tampoco en los pequeños detalles, en las sonrisas, en las lágrimas, en los últimos baños del verano y las primeras luces de navidad. Vivimos ignorando lo importante y admirando lo que creemos que lo es.
Pero hay algo que nos diferencia de las rimas, nosotros no somos como esas palabras que intentan enlazarse con la anterior.
Somos seres independientes. Desgraciadamente independientes. Con vidas paralelas pero no concurrentes. Que nunca se cruzan ni se tocan. Somos números sin sumas entre nosotros. Somos los peores animales de la tierra, los únicos que se matan entre sí, que luchan para extinguir la especie.
Indecisas. Perdidas y apresuradas. Inspiradas en todo aquello que me rodea, en la mugre que todo lo cubre, en el viento que todo lo barre.


                               


Y cuando tenemos la oportunidad de cumplir todo lo que queremos pronunciamos las siguientes-tan repetidas- palabras.

                                                      "Quizá mañana....."

sábado, 6 de diciembre de 2014

Tu trapecio y tu red

Oigo el sonido hueco y sordo, morriñoso y a la vez esperanzador de algo que cae. Algo ligero, no como una pluma pero si como una hoja de papel. ¿Una hoja de papel?
No me asusta. A pesar de ser las cinco de la madrugada y estar sola en mi cama acompañada de la cálida luz de una cerilla que se consume. No me asusta.
Quien quiera que haya dejado caer esa, tal vez, hoja de papel por la rendija de mi puerta debe de estar tan loco como yo. Rompo a reír. Eso es tremendamente imposible.
Arrastro mis pies descalzos por el pasillo con la misma parsimonia con la que esa,- tal vez-, hoja de papel se deslizó hasta el suelo.
Efectivamente. Reconozco los sonidos a la perfección. La- ahora ya puedo afirmarlo con certeza-, hoja de papel doblada descansa sobre el felpudo.
La desdoblo algo nerviosa, pues creo reconocer en las arrugas del doblaje del papel a alguien a quien conozco, extraño, amo y a la vez odio.
Primera estrofa de la carta- ni un título ni un saludo-.

"Puedo ponerme cursi y decir que tus labios

Me saben igual que los labios que beso en mis sueños"

Suspiro, sabiendo lo que me voy a encontrar- no por favor, o sí, no sé- y en mi cabeza empiezan a fluír imagenes, ligeras como manantiales de agua. Una detrás de otra. Él tendiéndome la mano, mientras esa canción suena. El suspirando en mi oreja.

"También puedo ser tu trapecio y tu red,

Tu adiós y tu ven, tu manta y tu frío, tu resaca, tu lunes, tu hastío"

No quiero. No quiero que seas, ni  siquiera quiero que seas mi nada, ni el líder de mis pensamientos. No quiero. 

"O tal vez esa sombra que se tumba a tu lado en la alfombra

A la orilla de la chimenea a esperar que suba la marea.

O tal vez ese viento que te arranca del aburrimiento

Y te deja abrazada a una duda, en mitad de la calle y desnuda.
O tal vez esa sombra que se tumba a tu lado en la alfombra
A la orilla de la chimenea a esperar..."

Desgraciadamente no tengo chimenea, sola una cerilla en proceso de desgastarse. Desgraciadamente ni chimenea, ni alegría, ni ganas de ti. Y, un poco desgraciadamente, hoy me siento lo suficiente lúcida para rechazarte. Aunque se que me estás esperando tras la fina puerta de madera. Por eso apoyo mi mano en el lugar donde intuyo que estará la tuya en el otro lado. Y casi te siento, casi siento tus ganas de volver a amarme para luego conseguir que te odie un poco más. 
Y ahora, esa canción, banda sonora de lo que fue nuestro amor me sabe a tormenta. Y me huele a hierba recién cortada. Lúcida dije, já. -río fuerte esperando que me escuches.-  

                       
Y lo escuchas. Y tu también ríes.

*Joaquín Sabina, A la orilla de la Chimenea.*

jueves, 4 de diciembre de 2014

Lágrimas en la soledad

LÁGRIMAS EN LA SOLEDAD
Desperté en mitad de la noche. Asustada. Tenía miedo, miedo a dormir para nunca más despertar, miedo a irme sin decir adiós. En fin, horribles presagios que acabaron por hacerme perder el sueño y la calma. Terrores que me hicieron romper a llorar sin más motivo. Y otro de mis temores se cumplió; me encontré sola, con la dolorosa compañía de mis lágrimas derramadas por la falta de cordura, que aunque parezca imposible llegar a estar loco, puede pasar. Cada día, los acontecimientos te superan, todo a tu alrededor parece querer matarte. Y luego, todo se tornó efímero; tus amistades, tus amoríos… Tu felicidad.
Fui presa entonces de un sentimiento de libertad repentino. Una idea cruzó mi trastornada mente como un rayo. ¿Por qué estar tan vacía teniendo fuera un mundo tan lleno de vida?
Cruce entonces el marco de la puerta. Guiada por una locura, guiada por la estela de una estrella fugaz que me llevaría a un fatal desenlace.
Vestida únicamente con mi camisón bordado empecé a caminar. La madera crujía bajo mis pies. A cada paso que daba me sentía más y más feliz. Mi mirada era vacua. Mi semblante serio. Mi sonrisa completamente forzada.
Llegué entonces al porche. Donde por primera vez dudé, pero proseguí mi marcha. El rocío de la madrugada me empapaba los pies descalzos, y el frío terminó por apoderarse de mi cuerpo. Haciéndome sufrir escalofríos, haciéndome temblar como una hoja. Así era de vulnerable.
Sentí el mundo bajo mi piel como nunca antes lo había hecho. Noté la elegante luna observándome desde su lugar en el cielo, y cada uno de las lejanas bolas de luz que brillaban a su alrededor se me asemejaron a las mil razones por las que estaba haciendo lo que hacia.
Corrí entonces, casi volando, con la soltura de una gacela. Con la belleza de un hada. Con la simpleza de la nada.
¿Alcanzaría de esta manera la felicidad que tanto buscaba? ¿Sería demasiado cobarde haciéndolo? Era el camino más fácil…
Faltaba poco para llegar al lugar. Apenas unos metros. Apenas unos minutos más, o viéndolo de otro modo; unos minutos menos en la vida.
El camino que estaba recorriendo,  el sendero de aquel frondoso bosque, insignificante, lleno de ortigas y zarzas,  me recordaba al trance que estaba atravesando en mi vida, la diferencia es que las espinas se clavaban superficialmente y no en el alma.
Me sentí tremendamente pequeña frente todo lo que había a mi alrededor. Tremendamente inferior.
Anhelé haber planificado más la salida…ropa de abrigo y unos zapatos no habrían venido mal, pero el impulso me llevó hasta donde me llevó sin pensarlo…¿Qué más da? A partir de aquel momento todo cambiaría para siempre…no más sufrimiento; no más dramas.
Por fin había llegado. Golpeé suavemente y esperé. Me lancé como llevaba años pensando hacerlo. Quizá esto me mataba, o me daría la vida.
Oscuridad.
Espera.
Segundos que se hacen eternos.
Vacío.
Soledad.
Luz.
Por fin la puerta se abrió, y me tiré como tantas veces lo había imaginado a los brazos de la persona que se encontraba al otro lado, me devolvió el abrazo.
Y en esa muestra de inminente cariño le susurré:
-Nunca más me separaré de ti. Nunca debí hacerlo.
Y después, tras respirar profundamente:
-Te quiero, hermana.


“Dicen que los amigos son lo segundo más preciado que se tiene. Primero los hermanos; amigos con un lazo mucho más fuerte. Amigos que nunca deben separarse. Amigos que en las buenas tal vez no estén, pero en las malas no nos abandonan. Amigos con mayúsculas.”
Ella recibió las palabras con una sonrisa y me dijo también que me había echado de menos.
¿Cómo pude enloquecer tanto como para estar años separada de mi razón de felicidad?
A partir de ahora, quemando una página antigua, con miles de hojas nuevas, blancas. Y miles de promesas que esta vez si que se cumplirán. Y de “te quiero” que se dicen sin hablar, simplemente con los hechos, con los abrazos, con las burlas, las bromas y las trastadas. Porque antes que decir está demostrar.
Y antes que ser amado estar saber amar.




Este fue un relato escrito hace tiempo el cual quedó finalista en un concurso. Lo encontré y decidí publicarlo. Aunque no me enorgullezco demasiado de el.

lunes, 1 de diciembre de 2014

El reloj implacable del tiempo

La página de su cuaderno permanecía pegada a su mesa; como si alguna fuerza extraña, en su simpleza, la mantuviera presa.
No entendía bien por qué continuaba allí sentada, pero allí seguía. Implacable al tiempo, al viento, al reloj de arena que avanzaba lento.
Ella perduraba. Sin percibir la tempestad de las horas. ¿Cuántos segundos habrían transcurrido?
Ni siquiera se lo preguntaba, había aprendido que la mayor enemistad del hombre es el testigo, quizás por su inconsciencia y mi omnipresencia. Por su desconocimiento del presente... sus dudas seguían latentes.
Al centellear del alba su cabello tornaba naranja, como un resplandor tostado del cielo.
Y, una noche más, comenzó a contar las estrellas del firmamento.
Sin poder conciliar el sueño, se dijo:
-Estúpida mente la mía, ¿por qué mi alma de hierro, anclada a este pedestal continúa aquí sin poder volar?
La tortura continuaba y en su digno enloquecimiento se volvió a preguntar por qué las estatuas tenían pensamiento.

domingo, 30 de noviembre de 2014

Slay

Salí de casa.
El abrigo no bastaba para proteger mis debilitados huesos del frío. Sirviendo de mínima barrera, de frágil escudo sostenido con los finos hilos de mi conciencia.
No sabía por qué, pero la tos se me había pasado con el portazo. Como si hubiera dejado mis fuerzas tras el umbral. Mis gritos, mis lágrimas, todo.
Me había desnudado y no sabía por qué. Mi había dejado acariciar y no sabía a quién le cedía aquel privilegio.
Quizás en el fondo sospechaba de sus constantes visitas al espejo, salidas a la farmacia y frecuentes sonrisas en su cuello.
Fui tan inocente, que me dejé perder en sus manos; cuando sentados sobre el lecho me mirabas y yo, vulnerable, le susurraba "Dime dónde está el sol".
Me contestaba que en mis ojos. Entonces me besaba con la dulzura con la que sutilmente mentía bajo las sábanas.
Solamente buscaba cobijo, un corazón latente que me pudiera albergar.

Pasaban los días, las tardes y las noches en vela, soñando despiertos.
En mi corazón sentía que lo quería y, cada vez que su piel rozaba la mía, se afianzaba.

Un día desperté y su calor se había esfumado. Sin darme explicaciones para entenderlo dijo que lo había cansado. Me acerqué, y al aproximarme lo sentí cada vez más distante que la primera vez. Le tendí mi mano pero se evaporó.
Y con el tiempo que me había dejado para pensar, comprendí por fin su toxicidad. Como si, de pronto, su veneno hiciera efecto en mi mente.
En sus ojos solo encontraba los míos. Como si el sentimiento que en ellos llevaba hubiera desaparecido; olvidando por completo mi olor y mi pasión. Como dos niños jugando a quererse.
Me gritó. Me dolió.
Y lo demás fue indescriptible, porque me apuñalaba poco a poco... haciendo que me sintiera indefensa, encerrada en mi locura.
Caminaba despacio. No había prisa por llegar a ninguna parte. El frío se apoderaba de mí. Ni siquiere hacía un esfuerzo por mantenerme despierta, como si siguiera creyendo que volvería a casa. Como si aquello no importase.
La mayor extrañeza llegó cuando me di cuenta de que caminaba encima de mi propia sangre.

Me desperté al escuchar mis gritos de dolor.

sábado, 29 de noviembre de 2014

La madre naturaleza.



Talk- Kodaline, a un volumen medio.


Escribir...crear nuestro propio mundo, esconder la realidad y refugiarnos en nuestro particular e insólito universo. Las personas que allí habitará, -nuestros hijos, nuestras creaciones- serán tal cual hubieras deseado que fueran las del mundo real.

Escribir es como magia, es crear algo de la nada contradiciendo las leyes físicas. Es sentirnos propietarios del rumbo de muchas vidas, y hacer lo que siempre hubiéramos querido hacer con la nuestra.

Escribir es escupir sentimientos sobre un cuadro en blanco, descargar la furia que nos habita, desgarrar una tela para tejer otra mejor. Y aunque sientes que no vale nada, puedes creerte un mago, un pintor, un tejedor, un dios. La madre naturaleza.

Tu decides. Tu eres el único que tiene ese poder. Haz de tus personajes lo que harías de ti mismo si tuvieras la oportunidad.

Dales alas y enséñales a volar; ellos harán el resto.




"Sometimes writing is running downhill, your fingers jerking behind you on the keyboard the way your legs do when they can’t quite keep up with gravity.” 

martes, 25 de noviembre de 2014

Smother










"I'm wasted, losing time I'm a foolish, fragile spine I want all that is not mine I want him but we're not right" 

Agazapada entre sentimientos de culpabilidad y suspiros desesperados.
Hundida en una taza de café en proceso de enfriarse y tal sola como un par de restos en un cenicero.Llueve, y la lluvia en este momento es la mejor frase que pueden decir para hacer mis lágrimas cesar. Lloro de impotencia. Siento que te estoy perdiendo el pulso contra mi soledad. Acabará por convertirme en una presa del destino.
Y en mi cabeza se repite un mantra, una frase ("nos dieron libertad tras habernos quitado las alas e inventaron la gravedad para no dejarnos escapar"), la cita era mía. La idea de muchos. De demasiados.
La espiral me absorbe. El hoyo negro de está tragando y lo peor es que han conseguido que mis pensamientos se queden fuera, flotando en el universo.
Para convertirme en un robot. ¿Porque eso es lo que quieren, manejarme?
    Agazapada entre sentimientos de culpabilidad y suspiros desesperados. Agazapada también en la         certeza de que la razón será lo último que me quitará.

I sometimes wish I'd stayed inside 
My mother 





lunes, 17 de noviembre de 2014

Estupidez

Podría decirte que te extraño, que te echo de menos, que lamento tu ida, tu venida, tu existencia lejos de mí, que lloro por ahogar gritos desesperados que me corroen. Podría decirte que te quiero, que te amo, que en ocasiones te miro, te espero, te obligo, que la mitad de mi alma es para ti.
Podría esculcarte en silencio, esculpirte en mi cerebro, memorizar tus lunares, recorrer tu piel con mis manos, aprender cómo es tu tacto.
Pero es tan fácil perderte también, olvidarte. Tan sencillo sería no sonreírte, dejar de observarte, evitar cantarte al oído, no pensar en ti cada minuto, que dejaras de convertirte en mi motivo para respirar. Tan simple, tan  simple...
Me gustaría decirte, susurrando, que espero que entiendas que mis latidos se acompasan a los tuyos, mi tiempo es tu tiempo y mi vida eres tú. La mañana, la mirada, la tarde, la nostalgia, tu voz, tu risa, tu respiración, tus ojos, tu tez, tu espíritu, tu presencia, la noche, la tristeza, la escapada en sueños para reconocerte.
Podrías darte cuenta de que es solo un trozo de un relato, de un poco más de mí. Quizás no tiene mayor importancia que otra historia de amor sin terminar. Porque nuestra tragedia fue un sainete, una carcajada que sale siempre de tus labios.
Porque cuando creo que puedo alcanzarte, sales huyendo de mí. Y puede que nunca haya sido más para ti que otra mota de polvo debajo de tu cama. Pero mi inexistencia sigue siempre latente.

Y te pido perdón por hacerte perder el tiempo con otro sentimiento que ha roto tu distancia.

viernes, 14 de noviembre de 2014

De tus ojos, de tu sonrisa.

Escuchando The Power of love- Gabrielle Aplin, a un volumen medio. 

"Todos hablan de ti. De tus ojos, de tus sonrisa. De tu popularidad. Hablan de ti como si llevaran toda la vida contigo y tuvieran mil cosas que contar.
Yo también hablo de ti, pero con mi almohada. Le pregunto que opina, le explico mis sentimientos. Le hago jurar que nunca dirá nada, pero ya ni en ella confío...
Escucho canciones de lo más estúpidas, de lo más cursis y románticas. Como si mi vida estuviera encontrando un sentido por fin...menuda tontería.
Maldito ese brillo de tu mirada que me hace sonreír. Malditas tus caricias que me hacen desear por primera vez más la vida que la muerte.
Maldito todo lo que empiece por a y termine por mor. Aunque sea tan solo un espejismo.
Intento convencerme a mi misma de que el anochecer será igual de doloroso aunque estés a mi lado, mi almohada dice que son excusas para no admitir lo enamorado que estoy.
No. No. No- agito la cabeza- imposible.
El amor no existe, es como el agua que se evapora para arruinarte un día de sol.
Es como un silencio eterno en el limbo que es la vida. No puede darnos nada más que estúpida ignorancia y fingido sufrimiento.
No. No. Nunca más. No soy una marioneta. El amor no va a hacer de mí lo que ha hecho de todos vosotros. Nunca me convertirá en su súbdito."

Dijo, segundos más tarde recordó su mirada y negó cada una de sus palabras. Pero no, no estaba enamorado, eh, que quede constancia, apenas. 



martes, 11 de noviembre de 2014

I Concurso de relatos Navideño

Guau, ya 60 seguidores, 6000 visitas, 160 entradas, 160 comentarios. Estamos de celebración, nótese la euforia aquí.
Estamos aguardando la navidad, diciembre es un mes precioso, ¿recordáis esos calendarios con sorpresas cada día antes de Navidad? Queremos que este blog se convierta en algo parecido.
¿Qué mejor que un concurso? Pero no como los otros, no, no, no. Un juego, con diferentes fases inesperadas. Aún quedan unos cuantos días para que termine noviembre, y si conseguimos que todos los relatos estén antes del diez de diciembre sería genial para comenzar nuestro "calendario navideño". 
¿Os animáis?





Bases: (muy importante)


-Seguir el blog

-Dejar un comentario en la entrada indicando que participas. 
-Llevarte el banner del concurso a tu blog
-Hacer una entrada en tu blog en la que digas que participas y dejes el link de esta entrada
-La temática del relato es libre
-Dejaremos el concurso desierto si el número de participantes es menor a 15
-Habrá cinco finalistas
-La final será una sorpresa, un juego donde luchar por el premio.
-EL relato se envía AQUÍ, con el asunto de "Concurso 60 seguidores". 
                                                   -Todos los participantes se llevarán un premio especial, además, la mayoria de los relatos serán publicados aquí, lo que supondría una pequeña publicidad para el blog. 



                                                                   - Sobre el relato: 

La temática del relato es libre. La extensión es completamente libre. Puede ser una reflexión sobre el amor, sobre la vida o un cuento sobre...deja volar tu imaginación.
Solo una única condición: el relato tiene que estar ambientado en una noche nevada.
Es importante que antes de vuestro texto pusierais la canción que queréis que escuchemos mientras leemos vuestra obra de arte. Siempre leemos y escribimos con música, y creednos, depende de la canción que escuchemos los sentimientos pueden ser optimistas o melancólicos. Queremos sentir que estáis narrando a nuestra vera.
Nos gustaría recalcar que dejaraiz fluir vuestros sentimientos por el papel. Escribid algo que realmente muestre una faceta de vosotros mismos.
Algo que, al leerlo te invite a reflexionar, que te haga volar, que te ponga la carne de gallina, que te asuste, que te emocione. Pero escribir un relato que realmente haga sentir.
Si no escribiéramos para transmitir algo, no seríamos personas.
Podéis poner fotos, de hecho, nos encantaría que acompañaseis el relato de fotografías que complementen las palabras.
El resto está en vuestras manos, sed vosotros mismos. Vuestras decisiones son las que deciden enviar una pequeña parte de vuestros corazones.
¡Hacednos sentir!

Premios: (pueden varías dependiendo del número de participantes)
>>1 libros
>>Publicidad para tu blog
                                                            >>Una cabecera para tu blog
>>Un diseño para tu blog lleno de detalles especiales (música, chat, imágenes, gadgets especiales...)




                      -Tenéis desde hoy hasta el día 10 de diciembre para enviar vuestros relatos.
-Recordad, no importa si ganáis o perdéis, será especial para todos.