viernes, 11 de abril de 2014

Tierno mundo.

Entonces sonreíste, y fue como un terremoto desgarrando mi interior. Mi alma no esperaba tal impacto,ni mi corazón. Fue como una bomba, una explosión. Fue como una guerra estallando en mi alma. Como la más bella de las mariposas batiendo sus alas por primera vez. Como un abrazo después de tantos años.
Pero cuando reíste, tus carcajadas sonaron como la más hermosa melodía jamás escuchada. 
Cuando me enseñaste tu ternura, y tus preciosos ojos azules centellaron. Cuando me dedicaste un sonoro llanto y te apoyaste en mi hombro con pupilas de cristal. Y tu caricias encantadas, tus melodías desterradas, y tus sonrisas desdentadas. 
Dedícame, la mirada más tierna jamás dedicada.
Mírame, hasta que me derrita y no queden ni cenizas de mí. 
Cenizas, que se lleva el viento, y que destroza el tiempo sin temor a sufrir. 
Sufriendo, me veré cuando pierda  manos de vista.
Dormir tu incertidumbre, sobre suaves mantas. Despejar tus dudas cuando se despeja el cielo. Diciendo adiós a nubes almidonadas, a eternas miradas. Y en ellas, ver reflejada la felicidad, de un invierno de nevadas, de un invierno blanco, del paisaje perfecto, donde dejar que se congele el tiempo, para nunca sufrir. 
Retornar a aquel tiempo, en el que solo un deseo, te dará la felicidad.

Hacerte crecer, entre cuentos de hadas. Dejarte oler, la fragancia del triunfo, poner a tu lado el acorde del fracaso, para que descubras que se supera luchando. 
Vivir a tu lado mil y una noches, dos mil aventuras e incluso una más. Cantar las notas de los recuerdos, contarte mis sueños, esos que crean fantasías encantadas, esos que alejan de una cruda realidad.
Y luego sentarme en aquel puerto, llegando hasta el tras un camino de baches, para así poder ver el mar que nace, en el horizonte de la tierra y el cielo.
Quisiera despertarte de una horrible pesadilla. Y hacerte saber que aún estás viva. Poner en tu boca el más dulce sabor, el de la alegría y el amor. 
Que llames a mi puerta e invitarte a pasar, al más bello rincón, a un nuevo mundo, con pensamientos más profundos y más sentidas palabras.  No puedes ver crecer tus frutos sin antes sembrar la semilla, no puedes madurar sin más sin antes un niño ser, por la infancia pasar.
Invitarte a entrar en mi vida, y cuando lo hagas, cerraré la puerta. ¿Sabes?, no quiero que te vayas. No por favor, no te vayas infancia. Se que tu corazón está soñando con dejar entrever tu inocencia, sé que se agota tu paciencia y te tienta la soledad.


Pues dejar volar a tu maripsa no debes retenerla más, hace lo posible, vuelve a luchar, cubre tus lagunas. 
"Como aquela bágoa, que deixouse morrer na lagoa da mágoa"
Como aquella lágrima que se dejó morir en la laguna de la tristeza.
Descubre la mariposa que tienes dentro. Pero no lo olvides. 
Debes saber que una mariposa recuerda siempre la oruga que fue. 




No me olvides nunca.