martes, 25 de agosto de 2015

Mis brumas I

Los poetas escriben
poemas
sin sentido
que, a veces,
son arte
que, en forma de rima,
logran disipar en un silbido.
Me pregunto
por qué,
entre tantas sonrisas que logras sacarme,
por qué,
con tantas y tantas formas que tienes de desatarme,
por qué
por mucho que la luna quisiera,
no se daría cuenta
de que el sol quema
y son muchas las estrellas que tendría que apagar,
antes de llorarlas en una noche de agosto.
Por qué si me pongo
en las manos de alguien que sepa escuchar,
jamás consigo
la misma terapia que obtengo
escribiendo en una servilleta
con una copa en un bar.
Ni consigo
esa forma que tienes de ignorar
la vida que pasa a tus ojos
mientras desencadenas
a otra alma en pena
que no hace más que llorar.
Mientras prometes
que algún día soltarás sus caderas
entre temblores de tierra,
y que moverás viento y marea
y que sus trémulas manos
y su gélido rostro
y sus ojos castaños,
o grises o verdes,
nunca azules,
(porque no te fías del mar),
tintinearán en tu firmamento,
y serán los astros de tus pupilas
cuando se atrevan a mirar.

lunes, 24 de agosto de 2015

Mujer, que nadie censure tu belleza.

Nada que añadir,
nada que restar.

Tu piel resplancdece, blanca cómo la nieve.
Tu pelo rojo arde avivado sobre la nieve de tu piel.
Incendios de nieve.

Siento el latido de la absoluta armonía,
tu cuerpo desnudo, la transparencia de tu tez.
Los ojos negros, la sonrisa pícara.

Estás tendida boca arriba.
Cómo un cuadro.
Me miras con cierta sorna.
Tu pecho sube y baja en cada respiración.


Nada que añadir,
nada que restar.



Simplemente nada que censurar.

Mujer, que nadie censure tu belleza.
Que nadie cuestione tu arte.
Que nadie sexualice la naturalidad de tus curvas sin tu consentimiento.
Seamos libres.
Seamos humanos. 

sábado, 15 de agosto de 2015

Somos iguales

Somos feministas...

Porqué aceptamos a toda mujer, sea blanca o negra, guapa o fea, desechando así la idea de que la mujer es un objeto sexual y para consumo del hombre

Porqué no nos importa la condición sexual de nadie

Porqué apoyamos a toda mujer sin hacer caso a su economía

Porqué nos creemos plenamente libres

Porqué llevamos el timón de nuestras vidas, sin someternos a nadie

Porqué vivimos para formarnos a nosotras mismas, no sólo para formar una familia

Porqué no criticamos las decisiones de cada cuál, su forma de vestir, su vida sexual...

Porqué no nos consideramos superiores a los hombres, simplemente iguales

Porqué rechazamos el sexismo y luchamos por una sociedad dónde los colores, los juegos, las películas etc no tengan género

Porqué somos independientes pero no desmerecemos la ayuda de nadie

Porqué decidimos sobre nuestro propio cuerpo

Porqué decidimos sobre nuestro destino, y nada ni nadie puede impedir que cursemos los estudios que deseemos

Porqué no permitimos ningún tipo de maltrato o acoso, ni a nosotras ni a cualquier otro ser humano

Porqué, en conclusión, creemos en una sociedad plenamente igualitaria, dónde mujeres y hombres convivan sin la superioridad de ninguno de los dos géneros, ejerciendo los empleos que cada cuál prefiera, dónde haya amos de casa y médicas, dónde se acepte a cualquier ser humano, sin importar su sexo, raza, orientación sexual, economía..., dónde todos y cada uno de nosotros, hombres y mujeres seamos libres, y vivamos para nosotros mismos. 

sábado, 8 de agosto de 2015

Luz aural

Ángel de la guarda,
de alas rotas,
de lunas llenas y almas vacías,
pequeño caído,
el menifluo caminar sobre la delgada linea de mis sueños.
Sonámbulo, perdido en mi mente desnuda,
vulnerable, dormida,
Etéreo ángel, destapa mis sueños,
mis íntimos pensamientos dormidos,
incontrolables y auténticos.
Noche no acabes,
dura eternamente,
deja que sus alas rotas acaricien mi pensar,
en la delgada línea entre la oniria y la realidad.
Y dibuja en mis sueños inmarcesibles melodías,
angelicales.
Antes de que la luz aural despierte los instintos dormidos,
arranque la inocencia.
Mientras tanto hazme arrebolar en sueños,
sonreír y llorar aún sin estar despierto.
Y cuándo amanezca me inundará la saudade,
de saber que no más que sueños,
son.

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jueves, 6 de agosto de 2015

Onírica


"La luna llena, y el alma vacía"







Las musas están durmiendo,
la música suena, aún sin ganas, 
un tango, 
la letra idealiza a una mujer, 
como tantas otras, 
de labios carmín y piernas infinitas. 
En la noche no queda más que un par de noctámbulos, 
tal vez poetas cantando a la luna, 
o degenerados buscando presa. 
El hombre de la canción me habla,
con voz rasgada. 
Hago crujir mi cuerpo, 
en un suspiro me acabo la copa. 
Respiro la noche, 
con la ventana abierta, 
escucho con atención a ver que me cuenta el silencio. 
Es el onírico y misterioso mundo oscuro, 
que alcanzo a observar desde mi balcón. 
Es la noche en carne viva, 
diseñada para hacernos temer o soñar. 
O añorar al que antes hacía esas noches más llevaderas. 
Soy el espectador desdeñoso e indiferente, 
que se limita a escribir, 
deshaciéndose con desapego de todas las palabras que se agolpan en su mente. 
No queda nada de magia en esta noche, 
por qué las musas duermen, 
y nuestros fantasmas tienen insomnio, 
¿porqué los poetas se afanan por escribir la noche, 
cómo algo sensual en su misterio?
Cuándo para mí es la casa infernal dónde aún habita tu olor.
Y cómo duelen los pensamientos a estas horas...
Resultado de imagen de tumblr noche


sábado, 1 de agosto de 2015

Seis años después

A veces me quedo hasta la madrugada leyendo y releyendo un cuaderno de frases que escribí en otra época. Cuándo todavía estaba hecha de retazos de poesía.
Algunas esconden detrás melodías, otras esconden los ojos brillantes de alguien que en otra época me perteneció.
Algunas esconden risas, esas risas a través de las cuales el destino me pedía perdón por su crueldad conmigo.
Algunas son tristes cómo la vida misma, y otras sencillas, sin artimonias.
Algunas son delicadas y suaves, acarician el alma.
En fin, todas te resumen.
De la forma más complicada que hay de definirte; con palabras.
Definen el silencio que existía entre nosotros y no importaba, porqué era precioso y valioso. Un silencio que en vez de romper intentábamos alargar.
Porqué habíamos entrenado con los días y las noches un lenguaje de miradas longevas, eternas, silenciosas. De pestañeos y sonrisas, que constituían nuestro íntimo diálogo.
Recuerdo cómo medíamos el tiempo por los látidos del otro, tus segundos corrían, los míos eran pausados.
Acelerabas mi pulso.
Ralentizabas mis reflejos, aumentando mis deseos y despertando todos mis instintos.
Tu boca era el sexto sentido dónde derretía mis quizás y agotaba mis miedos.
Tu pelo era una enredadera y recuerdo que me aferraba a él cómo si de él pendiera mi vida.
En cierto modo así era.
Necesitaba tu olor para desistir de mis intentos de encontrarle un lado positivo al mundo, tú creabas un mundo diferente en el que todo era positivo.
Recuerdo que estaba tan convencida de tu incondicionalidad que me rebelaba contra el amor que sentía, negándolo a ratos, tratándote como si no fueras nada.
Sabía que siempre me perdonarías, porqué me querías. Y si la cosa se complicaba volvía a ti, días más tarde, con una nueva frase que pintar en tu pared y mil perdones.
Lo curioso es que los admitías sin cansarte de mi cambiante humor.
Pero en cada una de mis rabietas el amor se desgastaba un poco más.
Y terminó por quedar roído.
Y ahora, tras esas mil frases que tal vez sigan pintadas en tu pared se esconde mi verdad.
Verdad de la que no queda ni estela, ni ceniza.